Los días contados

Álbum del marinero, 2 de marzo de 2008

No tengo que protegerme de nada. Quiero dejarme ver, y por eso puedo mostrarme.

Los rincones del alma han encontrado el jardín que el marinero de Antonio Machado no quiere volver a abandonar.

Marinero, que tantos viajes, que tantas veces has partido, vuelve, quédate.

Esa sirena que acabaste encontrando de tus muchos viajes te ha reconocido.

Fue un día de esos, cuando habías vuelto para cuidar el jardín de la costa.

Te vió mirando con nostalgia la Mar, el horizonte, las olas rompiendo. Y ahora, está allí, contigo. Observando, sintiendo y oliendo el salitre azul del mar, las esencias del bosque, escuchando el aire.

Está a tu lado, te dice que también quiere quedarse.

Y ahora que no tienes que salir al mar, te va a enseñar a nadar.

Enséñala tu a la sirena a galopar en tierra firme, enséñala a respirar.

Tomarás el tiempo que es vuestro, ocupad el espacio que os estaba esperando.

Quedaros, ya os habéis encontrado.